—Hola, negrita. —Eeeh, no te acerques tanto. Creo que no deberías estar aquí. —Pero eres negra ¿verdad? —Hombre, es bastante obvio ¿no? Aunque ya sabes que no se dice «negra». —Es que no distingo bien. Depende mucho del cuerpo. —¿Qué le pasa a mi cuerpo? —El tuyo está estupendo, pero hay veces que… —Yo a […]